El pecado original
En7 enero, 2021 | 0 comentarios | Sin categoría |

Todos llevamos la carga de algún pecado original.

El peso de una voz que no cesa, que muda en torrente helado, en alfileres que se clavan en lo más profundo del ser.

Un día, frente al espejo, te das cuenta de que llevas esa marca tatuada en los ojos, en la pesadez de tu mirada.

Entonces, te avergüenzas, porque sabes que has sido un cobarde.

Has estado utilizando tus faltas como excusa, como careta tras la que esconderte.

¿Por qué? Porque tenías miedo y no encontrabas respuestas más nobles.

No hay peor embustero que aquel servil de sus propias falacias.

¡Ya no vale parapetarse en el dolor de las heridas!

Un grito ha de estallar en tu caja torácica, para después subir por la garganta hasta perderse en el viento.

Y si encuentra unos labios sellados, que vuelva para tus adentros y se quede allí rebotando para siempre, recordándote:

¡PUTO COBARDE! ¡ALÉJATE DE MÍ!

Dejar una respuesta

  • Más artículos