anternet
Anternet Kike Sentís Masset
Anternet Kike Sentís Masset
Anternet por: Kike Masset ¿Por qué el trabajo de cara al público está tan infravalorado? ¿Te has preguntado por qué no está sonriente el dependiente? ¿Entras en la tienda sin preocuparte de la hora del cierre? Si buscas respuestas, puede que las encuentres en este libro. 12.30 € gastos de envío incluidos - COMPRAR LIBRO
Pago
Pague a través de tarjeta o por PayPal; si elige esta segunda opción, todo el proceso será más cómodo para usted.
Envío
Tiempo máximo de 7 días laborables.
Letrame Grupo Editorial
Si necesita más información sobre el envío, no dude en llamar al siguiente número: 912919352.
Sinopsis

Anternet: Anecdotario de la vida en Atención al Cliente

¿Por qué el trabajo de cara al público está tan infravalorado? ¿Te has preguntado por qué no está sonriente el dependiente? ¿Entras en la tienda sin preocuparte de la hora del cierre? Si buscas respuestas, puede que las encuentres en este libro.
Si has trabajado alguna vez en una tienda de moda, telecomunicaciones, deportes, etc., te sentirás plenamente identificado y no podrás desengancharte de él desde la primera frase. Si no es tu caso y eres usuario de estos establecimientos, puede que la próxima visita a la tienda de la esquina sea vista desde otra perspectiva y valores más, si no lo haces todavía, el trabajo de guerrilla de sus empleados.

1920
Sobre el autor
Kike Masset
Autor destacado

Nacido en Barcelona en 1979, Kike Masset es licenciado en Periodismo, Publicidad y RRPP, así como graduado en Sociología por la Universidad de Barcelona. Después de ser Redactor Jefe de una revista de moda durante trece años, ha sido en el campo de la Atención al Público y Ventas en los que se ha desarrollado laboralmente en la última década, desempeñando tareas desde oficial de almacén hasta Store Manager para numerosas firmas en varias localidades de la geografía española. Gracias a ello ha publicado su primera obra: Anternet, anecdotario de la Vida en Atención al Cliente.

http://Kike%20Masset

Porque alguien tenía que decirlo…