Arcadi Aran y Jaques Gambin
Cuando Arcadi Aran es arrancado de la Barcelona de su niñez, allí se quedan su mar y su infancia, comenzando para él la aventura del desarrollo desacertado de su vida y de su persona. En este encuadre, su trayectoria adulta se desplegará, en tiempos convulsos y revueltos, entre París y La Gonzaga; una isla caribeña donde Arcadi se dejará envolver en su mentira perfecta; una mentira que, solidos personajes, reales o no, y duros acontecimientos, contribuirán a darle forma y subirlo al éxito, pero también, a convertirlo en un espejismo de sí mismo del que solo los verdaderos sentimientos y la soledad, o el dolor, del mar podrían liberarlo y mostrarle la otra realidad: si lo entiende.