En este relato vas a escuchar lo que te cuenta un asiento de un autobús; sus vivencias del día a día e incluso algun que otro consejillo para cuando viajas.
Y si quieres leer un poquito más… Te dejo unas pocas lineas más:
Dentro de pocos minutos las señoras de la limpieza nos dirán «adiós» sacudiendo sus bayetas de limpiarnos, como hacen a diario cuando las agujas del reloj se disponen a marcar las 7 de la mañana. Transcurrido unos minutos, de nuevo emprendemos la aventura ¿Qué hazañas nos esperaran hoy? La vida en sí misma es una aventura, ya seas un ser humano, un animal, una fruta o un asiento de autobús, como es mi caso.
Y no, no os creáis que es fácil ser un asiento de autobús. Los humanos os soléis quejar del trabajo, del dinero, de vuestra pareja… pero nosotros también tenemos nuestros problemillas y, además, ¡cómo no!, nuestras anécdotas divertidas y peculiares.