Romper un silencio
que nunca ha existido.
Compartir lo que guardo
con quien quiera leerlo.
Siempre me ha gustado escribir,
será que al deslizar
letras en papel
no hay quien juzga
lo que debo hacer.
Siempre he pensado
que puede leer
aquel que esté abierto a sentir.
Aunque no es cómodo
presentarse así,
con el alma desnuda
a quien ve dentro de ti.
¿Por qué compartir?
Quizá porque yo
cuando leo poesía
siento una brisa
que remueve la conciencia.
Quizá porque alguien
se sienta en compañía
cuando se lea en mí.