Todos y todas necesitamos «salir del armario»
En12 junio, 2023 | 0 comentarios | Sin categoría |
“Rastros”, el tomo I de mi nuevo trabajo «Rastros y huellas en las fronteras de la psicoterapia sistémica», profundiza en los efectos que los modelos hegemónicos (socioeconómicos, culturales, religiosos, raciales y de género) ejercen a través de la imposición de normas y hábitos morales que nos fuerzan a la ocultación de determinadas características personales. Vivimos con partes importantes de nuestra personalidad ocultas “dentro del armario”, es decir, vivimos invisibilizando y enmascarando emociones, deseos y necesidades que son naturales y saludables. Todos y todas, ante la presión de lo correcto, interpretamos los acontecimientos de cierta forma, tomamos determinadas decisiones y actuamos en consecuencia.
En muchos casos, estamos ciegos ante la sólida presencia de estos parámetros morales, lo que nos recuerda al «hombre unidimensional» que ya denunció Marcuse (1964). Las patologías sociales producen, en muchos casos, normopatías, es decir, que el individuo que funciona acorde a lo impuesto por la cultura y la sociedad, sin distancia crítica, sin reflexión, ajustándose a la “normalidad” impuesta, puede sufrir importantes conflictos por la desviación a la que se somete respecto de sus propios deseos y necesidades.
Al final esta presión es la causa de muchos trastornos y dificultades emocionales. Los profesionales de la psicoterapia han de estar atentos a estas cuestiones. El proceso liberador de las presiones y restricciones, familiares y sociales, son parte esencial de una psicoterapia exitosa. La filosofía social es un instrumento que nos ayuda a analizar y sopesar cuestiones actuales como la cultura de la cancelación, la posmodernidad, el hiperconsumismo, las relaciones líquidas, el narcicismo como estilo.
La construcción de la masculinidad, de la feminidad, de la paternidad y de la maternidad, junto con la educación y la crianza de los/as hijos/as o el acercamiento a la realidad social, política y antropológica que vivimos en el siglo XXI son contenidos destacados de este libro, apostando por un ejercicio crítico de los sistemas sociales y proponiendo prácticas liberadoras y transgresoras que coadyuven a una adecuada salud mental.
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